- Osa Mina, Un Símbolo De Maltrato Animal
- Traslado A Un Centro Especializado
- Reacciones Y Consecuencias
- Un Problema Que Trasciende Lo Local En Nuevo León
- Exigen Transparencia Y Acciones Reales
- Mariana Rodríguez Sabía Lo Que Pasaba En Zoológico La Pastora
- Una Visita Que Lo Cambia Todo
- El Presupuesto Millonario De Parque Fundidora Bajo Sospecha
La Profepa clausuró temporalmente el zoológico La Pastora tras confirmar graves irregularidades en el manejo de la osa Mina. El caso destapó presuntas omisiones en la supervisión del gobierno de Samuel García y abrió un debate sobre la responsabilidad estatal en el cuidado de la fauna silvestre.
Osa Mina, Un Símbolo De Maltrato Animal
La historia de Mina comenzó con un video difundido en redes sociales. En las imágenes se observaba a la osa negra, en evidente deterioro físico, rodeada de moscas y sin la atención médica adecuada. La denuncia ciudadana rápidamente se viralizó y provocó indignación en Nuevo León.
Profepa informó que tras las inspecciones realizadas del 25 al 27 de septiembre constató que la osa Mina, considerada una especie en peligro de extinción por la NOM-059-SEMARNAT-2010, presentaba lesiones, úlceras, deficiencias nutricionales y un claro abandono médico.
El expediente reveló que la osa padece leptospirosis, enfermedad que no solo afecta a animales, sino que también puede transmitirse a humanos. Lo más grave es que no existían registros de atención, protocolos de control ni tratamientos para esta infección.
#ULTIMAHORA La @PROFEPA_Mx anuncia que trasladó a la Osa Mina 🐻a la Fundación Invictus para su tratamiento🙏 Gracias @mariana_boy por rescatarla de las garras de @samuel_garcias y @marianardzcant que la tenían desde hace dos años sufriendo en @PastoraZoo y querían sacrificarla pic.twitter.com/50NlVXFmJY
— Sanjuana Martínez Montemayor (@SanjuanaNews) September 28, 2025
Traslado A Un Centro Especializado
Ante la situación crítica, la procuradora ambiental Mariana Boy Tamborrell confirmó que la osa Mina fue trasladada de inmediato al Centro de Rescate, Rehabilitación y Reubicación de Grandes Carnívoros Invictus, en Pachuca, Hidalgo.
En este recinto recibe atención especializada y rehabilitación en condiciones seguras, tanto para ella como para el entorno. Según Profepa, el traslado era urgente para garantizar su vida, pues en La Pastora no existían protocolos adecuados para tratarla.
El caso de Mina se convirtió en un símbolo de las deficiencias del zoológico y del desinterés de las autoridades estatales, que durante meses no detectaron ni atendieron la gravedad del problema.

Irregularidades en el Zoológico La Pastora
Profepa estableció que el zoológico incumplió con la normatividad ambiental en materia de trato digno y respetuoso hacia ejemplares de vida silvestre. Por ello, colocó sellos de clausura como medida de seguridad.
La decisión no solo busca proteger a los animales que permanecen en el lugar, sino también salvaguardar la salud pública. La leptospirosis puede provocar daños renales y hepáticos en humanos, además de afectar a otros órganos vitales.
La medida evidenció fallas estructurales en el manejo del recinto y puso bajo la lupa la responsabilidad del gobierno estatal en su supervisión.
Reacciones Y Consecuencias
La clausura generó un fuerte debate público. Organizaciones y ciudadanos acusaron directamente al gobernador Samuel García de negligencia en la supervisión del zoológico y de mantener una política de omisión frente a las denuncias de maltrato animal.
El escándalo también derivó en cambios administrativos. Gustavo Sepúlveda Villarreal, coordinador general de La Pastora, fue separado de su cargo por decisión del Director General de Parque Fundidora. Sin embargo, los críticos advierten que la destitución no resuelve de fondo el problema, sino que apenas es una respuesta mediática.
Activistas han insistido en que el gobierno debe transparentar qué ocurrirá con el resto de los animales y si se aplicarán sanciones ejemplares a los responsables.
Monty, Otro Caso En La Mira
El caso de Mina no es aislado. En semanas recientes, activistas también denunciaron la situación de Monty, un elefante de 19 años que vive en soledad en el mismo zoológico. La falta de compañía y estímulos adecuados ha sido señalada como un grave problema de bienestar animal.
Con ambos casos, el Zoológico La Pastora enfrenta cuestionamientos severos sobre su capacidad para operar como espacio seguro para la fauna silvestre.
Un Problema Que Trasciende Lo Local En Nuevo León
La polémica por el Zoológico La Pastora se inserta en un debate más amplio: la pertinencia de mantener zoológicos bajo modelos tradicionales. Para muchos expertos, estas instituciones se han convertido en espacios donde se prioriza la exhibición sobre el bienestar de los ejemplares.
En el caso de Nuevo León, la falta de protocolos, supervisión y atención médica especializada evidencian no solo un problema administrativo, sino una visión política que ha relegado el cuidado animal a un segundo plano.
Las denuncias de organizaciones también apuntan a prácticas cuestionables como la presunta transferencia de animales hacia ranchos de cacería, lo que incrementa la desconfianza hacia el manejo estatal.
Exigen Transparencia Y Acciones Reales
Frente a esta situación, colectivos ciudadanos piden medidas urgentes: garantizar atención médica integral, transparentar el destino de los animales y sancionar a los responsables en Nuevo León.
También exigen que el gobierno de Samuel García asuma su responsabilidad y deje de minimizar los casos como incidentes aislados. La clausura del el Zoológico La Pastora es vista como una oportunidad para replantear el modelo de gestión, pero también como una advertencia de que la negligencia puede tener consecuencias graves.
En este contexto, la pregunta sigue abierta: ¿se priorizará finalmente el bienestar animal o se mantendrá un esquema de omisiones que pone en riesgo a especies en peligro de extinción?
Mariana Rodríguez Sabía Lo Que Pasaba En Zoológico La Pastora
La clausura del zoológico La Pastora tras el caso de la osa Mina es más que un acto administrativo. Representa la exhibición de un problema profundo: la falta de protocolos y de voluntad política para garantizar la vida digna de los animales.
La presión ciudadana, la acción de Profepa y la atención mediática han puesto en jaque a las autoridades estatales. Ahora, el reto es que esta clausura no se quede en un episodio aislado, sino en el inicio de una transformación que proteja de verdad a la fauna en Nuevo León.
Cuatro meses antes de que se destapara el escándalo por maltrato animal en La Pastora, la influencer y esposa del gobernador de Nuevo León, Mariana Rodríguez, visitó el zoológico y vio con sus propios ojos el estado en que se encontraba la osa Mina.
Aun así, no hubo denuncia, ni pronunciamiento público, ni acciones visibles. Su silencio hoy pesa más que cualquier discurso de “amor por los animales”.
Una Visita Que Lo Cambia Todo
La visita de Mariana Rodríguez al zoológico La Pastora ocurrió hace cuatro meses.
Durante su recorrido, convivió con el personal, grabó videos y posó frente a algunos recintos, incluyendo el hábitat de la osa Mina, cuya imagen se viralizó más tarde por el evidente deterioro físico que presentaba.
Según fuentes cercanas, la entonces directora del parque y varios empleados mostraron a Rodríguez el área donde permanecían los mamíferos y le explicaron la situación del lugar.
Aun con esa información y la evidencia visual, no se registró ningún llamado de atención ni solicitud de revisión por parte de la esposa del gobernador.
El detalle que hoy sale a la luz pone en duda la autenticidad del discurso “animalista” que Rodríguez promueve desde sus redes sociales y en sus apariciones públicas, donde se ha presentado como defensora del bienestar animal y promotora de la adopción responsable.
La Osa Mina, Símbolo Del Abandono Y Del Doble Discurso
El caso de la osa Mina fue el detonante que llevó a la clausura temporal del zoológico La Pastora.
El animal, que vivía en un espacio inadecuado y sin atención médica adecuada, fue encontrado en un estado deplorable: con alopecia, desnutrida y con visibles signos de dolor y estrés.
Las imágenes provocaron una ola de indignación y reacciones en todo el país.
Organizaciones ambientalistas exigieron responsabilidades, mientras que el Gobierno estatal guardó silencio.
Pero ahora se sabe que Mariana Rodríguez ya conocía las condiciones en las que se encontraba Mina, lo que ha generado fuertes críticas hacia su papel y su omisión.
La pregunta que hoy se repite en redes sociales es simple: si realmente le importan los animales, ¿por qué no hizo nada?
El Presupuesto Millonario De Parque Fundidora Bajo Sospecha
La revelación de que Parque Fundidora manejó un presupuesto de 947 millones de pesos ha puesto en duda la transparencia del gobierno estatal. Mientras se presume una gestión eficiente y proyectos “verdes”, los animales de La Pastora viven en condiciones alarmantes.
El caso de Mina, la osa que enfermó gravemente por la falta de atención médica y un entorno adecuado, se ha convertido en símbolo del abandono. La elefanta Monty, otro de los casos emblemáticos, también ha sufrido las consecuencias de una gestión que prioriza la imagen pública sobre el bienestar animal.
Aunque las autoridades han promovido campañas mediáticas sobre parques y sostenibilidad, los hechos muestran otra realidad: los recursos no se reflejan en mejoras tangibles para la fauna.
El Abandono De Mina Y El Silencio De Mariana Rodríguez
El deterioro en las condiciones del zoológico no es reciente. De acuerdo con fuentes cercanas al recinto, Mina se encontraba enferma desde hace meses, sin recibir atención oportuna. Se ha señalado que Mariana Rodríguez, titular de Amar a Nuevo León, tuvo conocimiento del caso cuatro meses antes de que se hiciera público, pero no tomó medidas inmediatas.
Este silencio, sumado a la falta de rendición de cuentas del gobernador Samuel García, ha aumentado la desconfianza ciudadana. La opinión pública exige respuestas claras sobre el uso del dinero y la responsabilidad del gobierno en el manejo de los recursos destinados a los parques estatales.
Corrupción Y Desvío De Recursos En El Corazón Del Gobierno Estatal
Los señalamientos sobre presuntos desvíos de recursos han crecido luego de que se detectara una administración paralela en Parque Fundidora, encabezada por dos figuras: Bernardo Bichara, como presidente técnico y ejecutivo, y Samuel García, como presidente honorario.
Ambos son señalados por haber ejercido el presupuesto sin rendición de cuentas transparente. Mientras tanto, el parque y sus instalaciones se mantienen en deterioro, y La Pastora continúa con animales desnutridos, jaulas oxidadas y espacios inadecuados.
Organizaciones de protección animal han denunciado que, pese al discurso ecológico del gobierno, no existe una estrategia real de bienestar animal ni inversión suficiente para el mantenimiento del zoológico.
ArrayConoce el presupuesto millonario de @parquefundidora ejercido a modo 🐀. Ese que nunca benefició a Mina 🐻 y a cientos de animales para que al menos tuvieran un hábitat digno y fueran alimentados y cuidados correctamente. Aquí lo q con ética y amor se ha conseguido para 🐻. pic.twitter.com/AfCXsR4jgf
— Claudia Tapia Castelo (@ctcastelo) October 22, 2025










